Kiteboarding Race Across Brazilian Desert – Red Bull Rally Dos Ventos

Hay muchas carreras de aventura a día de hoy, y la mayoría combinan diferentes modos de transporte como el remo, la bicicleta, correr… y algunas de ellas incluso tienen lugar en el desierto.

Pero no hay nada como la Red Bull Rally dos Ventos, que combina el kiteboarding, el surf de arena, la carrera a pie y la orientación.

Los participantes tenían como misión cruzar un tramo del desierto que se encuentra en el norte de Brasil, y que está plagado de lagunas. No había ningún itinerario marcado: solo la línea de salida y la de meta. Parece fácil, ¿verdad? Sí… hasta que empiezas a perderte.

Debido a las dunas de arena, que el viento va desplazando continuamente, era muy difícil saber dónde habría más extensión de agua para navegar.

¿Ya hemos dicho que el director de la carrera no dijo dónde se encontraba la meta hasta el día antes de la carrera? Pues es verdad; así fue. Equipados con sus GPS y sus brújulas, 45 kiters se pusieron en marcha en busca (literalmente) de la línea de meta.

“La clave para ir muy rápido,” reconoce Susi, “es encontrar mucha agua para poder navegar. Siempre vas más rápido en kite que corriendo por la arena.”

El día de la carrera coincidió con buenas condiciones de viento, que no dejó de soplar para que los kiters pudieran navegar con sus cometas de 8 metros.

Como nunca antes se había disputado una carrera de este formato, la gente no sabía qué esperar y muchos experimentaron con diferentes técnicas.

Sin ir más lejos Susi compró cera para arena, para poder deslizarse con su tabla de kite encima de la misma con mayor facilidad.

“Cada competidor tenía una estrategia propia y todos vivimos aventuras increíbles. Un kiter realizó saltos de más de 12 metros a favor del viento aterrizando en la arena. Otro convirtió su tabla en una mochila. Y otro acabó teniendo que correr durante 33 kilómetros porque se perdió.”

Mai reconoce que tuvo problemas para orientarse: “es como si me hubiesen acabado de sacar de una lavadora, pues no podía distinguir el norte del sur.”

Pero todos los competidores, en algún momento, tuvieron que utilizar sus tablas sin quillas debido a la poca profundidad de las lagunas.

El vencedor, un kiter local, tardó 37 minutos y en ningún momento se bajó de la tabla.

Según Susi, “encontró la manera de doblar exageradamente sus rodillas y sentarse sobre la tabla para poder navegar encima de la arena. Solamente tardó 37 minutos mientras que otros estuvieron horas. Al final, esta carrera nos obligó a todos a salir de nuestra zona de confort. Acabó convirtiéndose en una carrera contra uno mismo.”

¿Cuál es el siguiente paso? “Nos encantaría hacerla como la Ragnarok, con 300 participantes; a ver qué pasa. Hemos sido muy cuidadosos con el entorno y esperamos poder volver a celebrarla el año que viene.” ¿Y personalmente, como competidora? “¡Ha sido lo más loco e increíble que he hecho en mucho tiempo!”

Vía [http://www.redbull.com/es/es/adventure/stories/1331679958063/a-wild-wet-wind-powered-race-across-the-desert]